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La Policía detiene a 13 vecinos de Getafe que formaban una red de venta de cocaína en la zona sur y Levante

Agentes de la Policía Nacional han detenido a 13 individuos, todos ellos vecinos de Getafe, como presuntos responsables de un delito contra la salud pública y otro de blanqueo de capitales y han desarticulado una organización que surtía a mediana escala a otros distribuidores de la zona sur y el Levante de España.

Los arrestados adoptaban grandes medidas de seguridad, teniendo todos los vehículos que utilizaban habitáculos ocultos -caletas- para esconder los estupefacientes.

La investigación comenzó en el mes de marzo cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de un grupo delictivo dedicado al tráfico de drogas por la zona sur y el Levante de España, blanqueando posteriormente los beneficios generados.

El líder de la organización poseía gran cantidad de alojamientos por todo el territorio nacional y una extensa flota de vehículos que habría conseguido con sus actividades ilícitas, ya que carecía por completo de actividad laboral alguna. Su alto nivel de vida le llevó a comprarse un vehículo de alta gama a su nombre a pesar de no contar con ingresos legales.

Además del cabecilla, los agentes identificaron a una serie de personas y se pudo determinar que todos ellos vivían en la localidad de Getafe, aunque también contaban con inmuebles por toda España. Las amplias medidas de seguridad adoptadas por el grupo eran tan elevadas que los agentes tuvieron que emplearse a fondo hasta detectarlos.

Viajes 

La droga repartida a mediana escala por los componentes del grupo siempre se realizaba en el interior de garajes privados o comunitarios. Los viajes los solía realizar una sola persona o a lo sumo una pareja y siempre en un horario poco habitual, casi siempre por la noche. Cuando realizaban alguna parada la misma duraba el tiempo justo, siempre inferior a diez minutos y en otras ocasiones no llegaban a realizar parada alguna.

La clientela se repartía por las provincias de Cádiz, Málaga, Sevilla, Huelva, Alicante, Toledo y Plasencia y la distribución era en pequeñas cantidades que oscilaban entre los uno y cinco kilogramos de cocaína. Posteriormente los traficantes de cada localidad eran los que vendían la droga en pequeñas dosis ya preparadas para su consumo.

Una vez arrestados estos 13 individuos se procedieron a realizar nueve registros en diferentes localidades españolas, interviniéndose cinco kilos de cocaína, 35.000 euros en efectivo, cinco vehículos, 20 teléfonos móviles y un subfusil simulado.

La investigación continúa abierta.