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Margarita Salas, pionera en la investigación del ADN recibió en Getefe la distinción de doctora Honoris Causa

La científica Margarita Salas Falgueras, pionera en descubrir un mecanismo de duplicación de ADN con múltiples aplicaciones biotecnológicas, ha sido investida doctora Honoris Causa por la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) por sus “por sus relevantes méritos académicos y profesionales”.

Fue el pasado día 13 de setiembre, en el campus que la universidad tiene en Getafe,durante el acto de apertura del curso académico 2017/2018 presidido por el rector, Juan Romo.
La laudatio sobre Margarita Salas estuvo a cargo del profesor Juan José Vaquero, del departamento de Bioingeniería e Ingeniería Aeroespacial. La lección inaugural del curso 2018-19 fue impartida por de profesor Manuel Palacio Arranz, del departamento de Comunicación Audiovisual y Publicidad., concluyendo el acto con el discurso del rector, Juan Romo.

Margarita Salas, natural de Asturias, es una de las impulsoras de la investigación española en el campo de la bioquímica y de la biología molecular. Fue discípula de Severo Ochoa, con quien compartió numerosos trabajos científicos.
En la actualidad, es profesora ad honorem del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa de Madrid en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC-UAM). Además de haber desarrollado su actividad investigadora en multitud de organizaciones y asociaciones científicas, es académica de la Real Academia Española (RAE) desde el año 2003.

En 2016 se convirtió en la primera mujer en recibir la Medalla Echegaray, otorgada por la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, y, junto con este galardón, ha recibido numerosos premios y distinciones, como el Premio a la Excelencia Química, concedido en 2014 por el Consejo General de Colegios Oficiales de Químicos de España. Habiendo contribuído activamente a la visibilización de las mujeres en la ciencia, que se encuentran con numerosos obstáculos en su labor investigadora en un sector en el que aún priman los techos de cristal.

Salas, que continúa investigando a sus ochenta años, hizo hincapié en la precaria situación de la ciencia en España, defendiendo aumentar la financiación de la investigación básica, que es “bastante penosa”.
La bioquímica destacó de también la calidad de los investigadores españoles, ya que generan la octava producción científica mundial, contando con una financiación que ocupa el puesto treinta.