Las viviendas de VPPL que gestiona la Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda en El Rosón siguen siendo un quebradero de cabeza para el Gobierno local y, en especial, para los adjudicatarios de las mismas.
El pasado 4 de octubre, tras meses de protestas por parte de los futuros vecinos de estas 147 viviendas públicas, el Ayuntamiento anunciaba por fin la adjudicación de las obras, lo que se presuponía como el impulso definitivo para su construcción.
Sin embargo, tras cerca de dos meses desde ese anuncio, los propietarios siguen esperando noticias y las que les llegan desde la EMSV no son nada alentadoras. A día de hoy, aún no se ha suscrito el pertinente contrato con la empresa constructora que resultó adjudicataria de las obras, lo que añade más demora a un proyecto que se viene arrastrando en la ciudad desde que se sortearan estas viviendas en marzo de 2015.
En este sentido, los propietarios denuncian que la empresa municipal les informó en una reunión que las obras comenzarían en diciembre, si bien el retraso en la firma del contrato hace que las previsiones se marchen ya a principios de 2018.
A las consultas realizadas por los propietarios, la EMSV sigue respondiendo con evasivas, lo que ha vuelto a encender los ánimos. En este sentido, algunos de estos adjudicatarios han asegurado a Getafe Actualidad que vuelven a barajar la opción de darse de baja y exigir la devolución de cantidades, y estudian asimismo retomar las movilizaciones para reivindicar una vez más que se agilice al máximo el proceso de construcción de sus viviendas.