El Gobierno regional ha puesto en riesgo la viabilidad de los centros de atención a mujeres víctimas de la violencia de género haciendo que imperen los criterios económicos por encima del proyecto técnico en los procesos de licitación para adjudicar su gestión.
En el día de ayer, el Pleno de la Corporación municipal de Getafe aprobaba (sin el apoyo del PP local) una moción en la que se insta a la Comunidad de Madrid a “no subastar la licitación” de dichos centros, modificando para ello los pliegos para que la mayor parte de la puntuación sea para el proyecto técnico, en lugar de la rebaja económica como sucede en la actualidad.
“El objetivo es garantizar la mejor cobertura de las necesidades de estas mujeres y unas condiciones laborales dignas para las trabajadoras”, según ha detallado el Consistorio en un comunicado.
En este sentido, la alcaldesa de la ciudad, Sara Hernández, ha advertido que “la austeridad también mata, esta situación puede ahondar, por desgracia, en actitudes machistas”.
En el Pleno se exigió asimismo a la Comunidad de Madrid que se tomen otras medidas complementarias como restituir el número de horas que se han reducido de las jornadas laborales de las trabajadoras o no sustituir a educadoras sociales por integradoras sociales, ya que al tener una titulación inferior no pueden ejecutar las mismas funciones.
También se reclama que dote del personal necesario que garantice el buen funcionamiento de los centros y le insta a la subrogación por parte de la empresa adjudicataria de todas las empleadas de cada centro.
El Comité de Empresa de Intress-Madrid, en representación de los Centros de la Red de Atención de Mujeres Víctimas de Violencia de Género de la Comunidad de Madrid denuncia que el Gobierno regional de Cristina Cifuentes está “subastando al mejor postor” la asistencia especializada a las personas maltratadas en el ámbito familiar.