Opinión

EDITORIAL: Orgullosos del orgullo

orgullo homófoba

Estos últimos días la palabra de moda, sin ningún género de duda, ha sido “orgullo”.

La misma ha sido utilizada una y otra vez, incluso cayendo en paradojas semánticas y lingüísticas. Orgullo es un nombre masculino, con dos acepciones principales: exceso de estimación hacia uno mismo y sentimiento de satisfacción hacia algo propio o cercano.

Aquí en Getafe, está claro que lo más sonado ha sido “Orgullosos del Geta”, incluso por algunos que hasta hace poco tiempo no situaban a Getafe en el mapa o la consideraban una pedanía de paletos.

Expresión claramente motivada por el meritorio ascenso del equipo a la primera división. Sin embargo, muy pocos o más bien nadie, ha vociferado el ‘orgullosos de Ángel Torres’, presidente del Club y protagonista principal de subir al equipo por primera vez, mantenerlo once temporadas en la categoría reina y conseguir este segundo ascenso solo un año después.

Aunque a primera vista podría parecernos que estamos ante la segunda acepción del término ‘orgullo’, en realidad estamos ante la primera. Queremos atribuirnos un éxito colectivo cuando no hemos tenido ninguna participación en el mismo, sin dejar a un lado que algunos han creado dudas, incertidumbres, desconfianzas, críticas, etc… Sin ninguna duda, el orgullo, el nuestro.

Otro titular que no podíamos dejar pasar es el dado por nuestra omnipresente alcaldesa. Se pueden hacer muchas críticas a su gestión, pero lo que no se le puede negar es que está en todos los lugares y rincones de Getafe, como si se multiplicara. Pues bien, titular en Getafe Capital: “Estoy muy orgullosa de haber pertenecido a los gobiernos de Pedro Castro”. Otro claro ejemplo de que nos encontramos ante la primera acepción y no la segunda, es decir, la de atribuirse uno mismo en exceso méritos que le corresponden a otro. Por otro lado, todo el mundo sabe que las relaciones entre los protagonistas son más bien malas.

En Getafe Actualidad sí nos gusta utilizar la palabra orgullo en su segunda acepción, como también han demostrado cientos de miles de personas en Madrid, estos días.  Como sentimiento de alegría, de diversión, de diversidad, de lucha compartida por muchos hacia la consecución de nuevos derechos y consolidación de los existentes por un colectivo claramente discriminado todavía, en definitiva, de satisfacción hacia los avances conseguidos.

Nosotros, lo decimos muy claro, “Orgullosos de Getafe”, es un sentimiento propio, cercano, colectivo, de quienes consideramos muy meritorio cualquier avance económico, político y social de nuestro pueblo, venga de donde venga. Por encima de cualquier diferencia, está ese espíritu de conexión colectiva que desde Getafe Actualidad queremos seguir alimentando: “De Getafe”.